Menino Gutto, San Pedro Bonfim y Curandeira presentan ´Maduro con Queso´
     





Menino Gutto continúa adelantando el universo emocional de Maracanazo Vol. I con
Maduro con Queso, un tema nostálgico y profundamente humano, en colaboración con
San Pedro Bonfim y Curandeira. El sencillo, un bolero con alma andina que huye de lo obvio, captura un momento de vulnerabilidad compartida, en donde lo afectivo se mezcla con lo cotidiano y funden con un espíritu acústico y confesional.
 
La canción es el resultado de una conexión instantánea entre Gutto y Pedro Bonfim. Una relación artística basada en la sensibilidad, la honestidad, sus raíces y el caos compartido da como resultado nuevas maneras de contar problemáticas sentimentales.
 
En palabras de Gutto, "empezamos con una USB con samples que Pedrito llevó a mi casa, Maduro con Queso se gestó como una escena en donde escapábamos de un espacio que nos generaba incomodidad. Ahí empezamos a hablar de ese miedo que tenemos como artistas; qué es lo que nos pasa cuando vamos a una fiesta, un espacio social, ¿quiénes somos? Somos esta gente introvertida que le cuesta conectar, sentirse parte de. Las sensibilidades salen a brote. Estábamos en sintonía".
 
La participación de Curandeira, artista ecuatoriana con una voz cargada de textura y sanación, termina de moldear el alma del tema. Su intervención lleva el track a un plano más profundo, convirtiéndolo en una suerte de plegaria íntima sobre la pérdida, el hambre emocional y la resignación. Maduro con Queso es una alusión a esa búsqueda incesante para resolver vacíos y llegar al doloroso momento de encuentro con aquello que no era lo que queríamos en primer lugar, el anhelo de algo mejor cuando no hay mucho más.  
 
En su resonancia más cruda, también evoca el nombre de una droga callejera popular en Ecuador, dejando entrever que, a veces, lo que alivia también encierra una trampa.
 
Este lanzamiento es un nuevo adelanto de Maracanazo Vol. I, el tercer álbum de
Menino Gutto, donde se explora la derrota como punto de partida, la ternura como resistencia, y la colaboración como forma de sanación. El disco, previsto para este 2025, promete un recorrido sonoro entre club, clásico e íntimo, con colaboraciones que cruzan fronteras e idiomas.